Los
datos dados a conocer por el INDEC esta última semana que determinan que la
ciudad de Concordia tiene el porcentaje de pobreza más alto del país por encima
de Catamarca, partidos del Gran Buenos
Aires, Formosa y Posadas pone de manifiesto el fracaso de las políticas
sociales aplicadas sobre el conurbano más poblado con necesidades básicas insatisfechas de la
Provincia de Entre Ríos y el más alto índice de subsidios nacionales y
provinciales en comparación con el total provincial.
El
INDEC dio a conocer que en Concordia, el 10,6 %
de su población es pobre mientras
que el 3,3% es indigente. En números
esto significa que en un total
aproximado de 137.046 habitantes en la ciudad,
14.526 personas viven con menos
del mínimo considerado por el mismo organismo para no estar en la categoría de
pobre. Los 13 pesos diarios que de acuerdo al INDEC
necesita una persona para subsistir
deben alcanzar a una persona para alimentarse, vestirse, educarse y
abonar servicios básicos.
Pero
más lamentable aún es que más de 4.500
personas vivan en la total indigencia, sin cubrir lo elemental para sus vidas,
a lo que hay que agregar la total desidia del Estado en brindar la cobertura de
servicios básicos mínimos como agua potable, luz y vivienda digna.
Esta
es la realidad de Concordia hoy. Una ciudad a la cual la Sra. Presidente en su
visita el 30 de agosto de este año halagó resaltando su “pleno empleo” y comparando la actual Ruta 14 con las
autopistas de Nueva York.
A
escasos metros, cientos y cientos de personas viven hacinadas en asentamientos
irregulares, casas de cartón, ausencia de agua potable, colgados a postes de
luz comunitarios y reciclando directamente del campo de basura a cielo abierto
más grande de la región, su comida diaria, aún a riesgo de su propia vida, como
la de Maximiliano Aldana.
Una
ciudad que posee el mayor número de beneficiarios de programas sociales: 2034
beneficiarios cooperativizados del Programa
Argentina Trabaja, incluida una Concejal del Frente para la
Victoria, más de 6000 beneficiarios de la Asignación
Universal por Hijo , los que sumados a pensionados graciables y jubilados sin
aportes al sistema previsional representan más del 20% de la población.
Entonces, como nos convertimos en la ciudad más pobre del
país? La evidencia se encuentra en la
inexistencia de políticas que tiendan a la verdadera inclusión social que no
pasa por el subsidio puramente
asistencialista sino que fundamentalmente debe apoyarse en
lograr la reinserción a través de programas que le otorguen
posibilidades de crecimiento y movilidad social a las personas, el más grande
principio de la doctrina peronista.
La ciudad
clientelistica en la que el kirchnerismo nos ha convertido no ayuda a nadie, salvo a quienes la
impulsan. Los pobres siguen siendo pobres, sin ningún atisbo de mejoría, a
pesar de los aumentos de subsidios
anunciados que no cubren el 50% de la inflación mensual. Y muy por el contrario, cada día, son más los pobres
que se convierten en indigentes, siguiendo las estadísticas crudas del INDEC,
un organismo alejado totalmente de la realidad con porcentajes en menos para
suerte de algunos y en desmedro de la mayoría.
Los avances que pueden ser considerados como tales en la
ciudad, no sirven, se pierden, se diluyen ante la triste realidad de una Concordia a la cual el gobierno pretende
mantenerla como epicentro del clientelismo necesario para continuar en el
poder.
No existen políticas a mediano o largo plazo, planificación,
búsqueda de inversiones, creación de
empleo, inserción, recursos propios destinados por el municipio para viviendas
sociales. Los programas sociales enlatados del Gobierno Nacional excluyen del
sistema a aquel que puede conseguir un trabajo inclusive
los zafreros como el citrus y el arándano que nos caracterizan
dejándolos fuera de beneficios como el
Interzafra, del cual 4500 beneficiarios de la AUH quedaron fuera en el verano
de 2012.
Desde hace más de 3 años, el Frente Entrerriano Federal lucha por una provincia mejor, con mayor
equidad y con verdadera inclusión social. Esa inclusión está representada por programas destinados a crear
empleo, a buscar inversiones con mayor necesidad de mano de obra no calificada,
a la búsqueda constante de la
regularización de terrenos usurpados que puedan convertirse en viviendas dignas
con servicios básicos mínimos para las familias que hoy se encuentran olvidadas
y lejos del poder estatal, a la
creatividad para destinar el presupuesto a
las necesidades verdaderamente importante de la población y no sólo de
un sector privilegiado. Paradójicamente, buscamos incluir a la misma clase
social a la que dicen servir.
Y
con estos principios, con nuestra experiencia, con la ayuda, con la
colaboración de todos pretendemos seguir en ese sentido.
Concordia
es una ciudad que merece mucho más que este triste presente. Y el peronismo
sigue siendo la única alternativa a
través del Frente Entrerriano Federal, un partido político de peronistas
abierto a toda la sociedad, en la búsqueda de resultados concretos y duraderos
sin renunciar a nuestra historia y nuestras convicciones a través de una lucha
desigual pero sincera, con ideas, con debate, con propuestas de cambio profundo
que nos permitan a todos vivir en una ciudad mejor.
La
ciudad es de todos, incluyamos a todos.
Concejal
Alberto Zadoyko
Maria
de los Angeles Petit FEF Concordia.